Jugar al fútbol donde sea, en la plaza, en la escuela o en el living de casa. Armar un partido como venga, aquí, ahora, con buenos jugadores, con malos, no importa. Patear la pelota, eso es lo que cuenta y ponerle garra, pasión. Golear al equipo contrario o por lo menos hacer un gol.
Tres cuentos para transpirar la camiseta. Un partido de plaza, otro de patio de escuela y otro contado por la redonda, una pelota dotada de voz.
EDITORIAL DEL NARANJO. 56 PÁGINAS
Jugar al fútbol donde sea, en la plaza, en la escuela o en el living de casa. Armar un partido como venga, aquí, ahora, con buenos jugadores, con malos, no importa. Patear la pelota, eso es lo que cuenta y ponerle garra, pasión. Golear al equipo contrario o por lo menos hacer un gol.
Tres cuentos para transpirar la camiseta. Un partido de plaza, otro de patio de escuela y otro contado por la redonda, una pelota dotada de voz.
EDITORIAL DEL NARANJO. 56 PÁGINAS
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