Una colección de títeres de dedo para jugar a representar las historias clásicas de Los tres cerditos y El gato con botas. Cada álbum contiene material para jugar a representar dos cuentos tradicionales, con tres láminas de títeres por cuento, un teatrillo para montar, y las instrucciones y los guiones de los cuentos.

32 PÁGINAS. 30 X 22 CM EDITORIAL COMBEL


Laura Ferracioli

(Rovigo, Italia, 1964). Estudió Bellas Artes en Bolonia y vivió diez años en Barcelona, entre 1993 y 2003. En esta ciudad pudo desarrollar su estilo con más libertad en revistas, periódicos, cubiertas, carteles y, ¿cómo no?, en libros para niños. Piensa que, como en muchos otros trabajos, para dibujar bien es importante divertirse haciéndolo y buscar siempre nuevos retos y estímulos, además de cultivar siempre el sentido del humor. Le gusta el chocolate con churros, los objetos de plástico de colorines, los pichis, los "todo a cien", los jardines, el mar, tomar café con los amigos, Londres, mucha música de muchos tipos y cantar tocando, muy mal, la guitarra. Hace tres años que volvió a vivir a Rovigo y a mimar a su familia desde mas cerca.

TITERES DE DEDO + GUION PARA ACTUAR. LOS TRES CERDITOS Y EL GATO CON BOTAS

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Una colección de títeres de dedo para jugar a representar las historias clásicas de Los tres cerditos y El gato con botas. Cada álbum contiene material para jugar a representar dos cuentos tradicionales, con tres láminas de títeres por cuento, un teatrillo para montar, y las instrucciones y los guiones de los cuentos.

32 PÁGINAS. 30 X 22 CM EDITORIAL COMBEL


Laura Ferracioli

(Rovigo, Italia, 1964). Estudió Bellas Artes en Bolonia y vivió diez años en Barcelona, entre 1993 y 2003. En esta ciudad pudo desarrollar su estilo con más libertad en revistas, periódicos, cubiertas, carteles y, ¿cómo no?, en libros para niños. Piensa que, como en muchos otros trabajos, para dibujar bien es importante divertirse haciéndolo y buscar siempre nuevos retos y estímulos, además de cultivar siempre el sentido del humor. Le gusta el chocolate con churros, los objetos de plástico de colorines, los pichis, los "todo a cien", los jardines, el mar, tomar café con los amigos, Londres, mucha música de muchos tipos y cantar tocando, muy mal, la guitarra. Hace tres años que volvió a vivir a Rovigo y a mimar a su familia desde mas cerca.

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